Data Mesh reconoce este statu quo en la mayoría de las empresas y lo promueve. La responsabilidad se distribuye entre equipos departamentales o de dominios específicos que proporcionan los datos como un producto. El término «producto» está vinculado a la expectativa de que personas ajenas a la empresa puedan consumir fácilmente los datos proporcionados por un equipo, mediante la normalización en el suministro y la documentación. Esta nueva perspectiva es crucial para el éxito. Cada equipo es responsable de su propio producto de datos, de su almacenamiento, de la propiedad de los datos y de la garantía de calidad. Desde el punto de vista organizativo, estos equipos se crean de forma ágil y se dotan deliberadamente de personal con experiencia en el dominio y en el desarrollo informático.
Esta estructura descentralizada pretende fomentar la flexibilidad y la escalabilidad, ya que los distintos equipos pueden trabajar independientemente unos de otros sin tener que depender de una instancia central. En este sentido, una posible implementación informática del enfoque de malla de datos podría ser un almacén lógico de datos.
Para que una estrategia de malla de datos tenga éxito, deben utilizarse normas definidas centralmente, como API o convenciones de nomenclatura, para permitir el intercambio de datos entre los dominios. Esto permite una mejor integración y colaboración entre las distintas partes de la organización.